viernes, 26 de octubre de 2012

CAP.3: Ojalá nuestra amistad sea para siempre.



Valen entró en la habitación.

  - Me voy a cambiar- me dijo

  -¿Para qué?

  - Nos vamos a ir a cenar

  - ¿A si, donde?

  - A una pizzería, yo te invitó.

  - No te voy a dejar

  - Ya veremos…

(Narra Ali)
Finalmente accedí a ir con él creo que fue mi mejor elección, al fin y al cabo quería despejarme de lo de mis padres. Antes de ir a la pizzería, que se llamaba " Sarrionini", pasé por mi casa, me cambié y avisé a mi hermano.
Me puse esto:



Valen iba con una camiseta bastante apretada, que con ella se le notaban los abdominales, ya que iba a fútbol y al gimnasio. También iba con una gorra que yo le había regalado hace tiempo.

El sitio no era muy romántico pero con tal de estar con él todo era perfecto. Era así:



Nada más llegar me besó y la verdad es que me dio un poco de corte que lo hiciera delante de todas aquellas personas, pero me encantó. Nos sentamos en una mesa un poco alejada del resto, el camarero se tomó nota de lo que íbamos a pedir y se fue.



      - Valen, no puedo más, enserio. Estoy fatal.

      - ¿Qué te pasa pequeña? cuéntame lo que sea, sabes que te voy a ayudar        en todo.

      - Son mis padres que se van otra vez - me entraron muchas ganas de llorar pero sabía que lo tenía a él.

      - ¡Eiii! ni se te ocurra llorar. Eres preciosa no lo olvides y te mereces todo.
    
    Me besó otra vez y en este momento me daba igual lo que los demás pensaran, fue el mejor sentimiento de el puto día y todo gracias a él.


    Terminamos de cenar y finalmente el ganó y no me dejó que pagara. Me acompaño hasta casa y nos despedimos.
     
      - Adiós preciosa, te quiero - me beso tiernamente.

      - Adiós yo también :)

      - Y no estés triste y sonríe que tienes la sonrisa más perfecta del mundo.

    Nos volvimos a besar y se tuvo que ir, también porque eran las 11:30 y mañana había clase.
    
    (Narra Natalia)
    
    Acabé de cenar y me fui a mi habitación, después de estar escuchando la radio y con el twitter, decidí llamar a Ali. Quería preguntarle que le había pasado y porque se había ido a casa.
    
      - Ali, tía, ¿que tal estás?

      - ¿Natalia?

      - Sí soy yo, ¿estás mejor?

      - Bueno acabo de venir de cenar con Valen pero es que no me puedo quitar        de la cabeza que mis padres se han vuelto a ir. Estoy fatal.

      - ¿Qué? ¿¡¡Se han vuelto a ir!!?

      - Sí, joder. No puedo más.

      - Iría ahora a tu casa pero no me dejan.

      - Tranquila que mi hermano tampoco me dejaría que vinieras ahora. Él   también está jodido.
    
    Seguí hablando con ella, estaba destrozada pero le hice reír y le anime un poco. Necesitaba verla, abrazarla, sacarle esa sonrisa y que supiera que estaba con ella. Pero mi madre vino a decirme que me fuera a la cama y me tuve que despedir de ella.
    
    (Narra Ali)
    
    La verdad es que hablar con Natalia siempre me ayudaba, pero seguía mal. Entre al ordenador y me llegó una petición de Angela para hacer una videollamada. Estuve hablando con ella hasta la 1:30, así que nos despedimos. Después me duché, me puse el pijama y me fui a dormir.

    Pasaron dos semanas y mi relación con Valen iba genial. Nunca había conocido a nadie como él. Y no era como los demás de nuestro instituto que eran todos unos críos. Además me di cuenta que Angela era super simpática. Me enseñaba muchísimo inglés que me venía genial y me dí  cuanta de que se estaba convirtiendo como en una hermana para mí. Me daba consejo en todos los bajones que tuve con Valen siempre nos ayudaba a resolverlos. También me ayudó a reflexionar y tomar algunas decisiones. Pero me estaba distanciando de Nat, no me daba cuenta. En el patio estábamos juntas pero las cosas no eran como antes fueron cambiando poco a poco. Fuera siempre estaba con Valen y hablando con Angela y nunca quedaba con ella.


    Ya lo había consultado con mi hermano y era oficial. Él iría hoy hacer todo el papeleo y a comprarlo todo. Así que ahora llegaba el momento más difícil hablar con Nat y Valen. No sabía como hacerlo, esto era muy complicado, sabía que les iba a hacer mucho daño pero se lo tenía que contar cuanto antes. Decidí contárselo primero a Nat, ya que ella era mi mejor amiga y me ha ayudado mucho. Cogí el teléfono y marqué su número.


      - ¿Si? - me contestó Nat.


      - Soy Ali, ¿podemos quedar hoy, tengo que decirte algo muy importante?


      - Vale, pero ¿Es muy grave?


      - Ahora te cuento, a las cinco en el starbucks ¿vale?







domingo, 21 de octubre de 2012

CAP.2: Llega el momento que tantas decepciones ya aburren.



(Narra Ali)

Pfffff… estoy harta, siempre me vienen con lo mismo. No les importo nada. Lo último que ha pasado ha sido hoy cuando he vuelto del instituto y encima por teléfono.

(5 min.antes)

       ¿Si, quién es? – pregunté

       Ali, soy tu madre

       ¿Qué quieres ahora?

       Estoy en el aeropuerto que me voy un mes con tu padre  a América. Así que te quedas con tu hermano, pórtate bien ¿vale?

       Mamá, estoy ya muy cansada de que nunca estéis en casa siempre viajando, no os importamos. Parece que Ricard (el hermano de Ali) sea mi padre y madre a la vez. Si ya sé que tiene 18 años pero él también está harto de cuidarme. Ya tuve bastante cuando no estuvisteis en mi cumpleaños, él fue el único que me felicito y me preparó una fiesta. ¿Por qué? Porque papá y tu estabais de viaje como no…

       Por favor Ali no me lo recuerdes ya te pedí perdón y no me hables así que soy tu madre.

       Mmmmm… ya ya no me interrumpas ¿vale?

       Adiós Ali…

Me cabreé mucho, me puse a llorar y a gritar de rabia. Definitivamente perdí el control. Don Raúl, el profesor de dibujo, que era bastante sexy y nos ponía a todas y a algunos (jajajjaja) vino y me dijo que me fuera a casa si tenía problemas.
Llegue a mi casa y vi a mi hermano que acababa de volver de la universidad.

       Oye, ¿te has enterado de lo de mamá?

       ¿Qué dices?

       Se van a América con papá, otra vez…

       Pero que dices, no inventes sino ya… – no pudo acabar la frase porque le sonó el móvil.

(Conversación en el móvil)

        ¿Qué quieres? – dijo mi hermano.

       Tengo que decirte algo.

       Mamá, ¿Eres tú?

       No, soy tu padre.

       Que me vas a decir ahora … que te vas otra vez… ¡Adelante vete! -.-

       Pero Ricard, necesito ir con tu madre, tenemos cosas que hacer.

       Sí… siempre la misma escusa. Adiós espero que os lo paséis bien…

       Esper…

Mi hermano colgó y se fue cabreado a su habitación. Yo me fui a mi habitación que era amarilla y marrón llena de pósters, no era muy grande ya que no tenía mucho dinero.


Ya habría pasado 1 hora y media desde que había llegado y como me aburría mucho decidí llamar a Valen (mi novio) para quedar.

No vivíamos muy cerca así que cogí un bus y llegué a su casa. Era así:




Valen tenía bastante dinero pero no era rico.
Llamé a la puerta y me abrió su hermano que era también bastante sexy.

       ¡Hola! ¿Está Valen?

       Sí, pasa está en su cuarto.

       Vale, gracias.

Subí las escaleras, fui hacia su cuarto y llamé a la puerta.

       ¡Pasa! – me contestó.

Entré y estaba hablando con alguien.

       ¿Qué haces? – le pregunté.

       Estoy hablando con una amiga que conocí cuando me fui de intercambio a Londres. Lo que pasa es que se ha ido al baño.

       Si, ya… una amiga y yo voy y me lo… – no me dio tiempo a acabar la frase porque me calló con un beso. 

       ¿Qué no confías en mí?

(Conversación en inglés)

       ¿Valen estás? – preguntó ******

       Si si Angela (es un nombre inglés por eso sin tilde)

       ¿Quién es la chica?

       Ah, es mi novia Ali. Ali ella es Angela.

       ¡Hola!

Le pregunté lo típico de que tal y eso y luego no me enteré de nada estaba un poco despistada y celosa también.

(Narra Natalia)

Ya había llegado a casa hace tiempo e iba a llamar a Ali para ver lo que le había pasado, pero me empecé a acordar de todo lo de mi hermano más lo del bullying y empecé a llorar, no pude evitarlo menos mal que mis padres no estaban solo estaban mis dos hermanos. Uno tenía 19, Joan, y casi nunca estaba en casa, siempre estaba trabajando en el restaurante, con su novia o de fiesta era raro que estuviera en casa y mi otro hermano se llama Chris:














Se parece mucho al de las fotos, tenía 9 años y subía videos a youtube de él rapeando. Por su “culpa” estaba llorando. Justo oí la puerta de mi cuarto abrirse así que me sequé las lágrimas como pude y me giré para ver quién era.

       Nataliaaaaa no entiendo estos problemas – me dijo Chris – Un momento ¿Por qué lloras?

       No estoy llorando. –  intenté mostrarle una de mis mejores sonrisas – a ver que quieres.

       Me gusta cuando sonríes – me estaban entrando unas ganas de llorar inmensas – ¿me explicas esto?

Estuve una hora explicándole los problemas a Chris, así que ya eran las 21:30 y mi madre acababa de llegar, normalmente cuidaba yo a mi hermano porque mis padres llegaban muy tarde de trabajar. Bajé a la cocina y ayudé a mi madre a preparar la cena.

(Narra Ali)

Angela se despidió de nosotros pero antes me dio su skype, al final me uní a su conversación y me acabó cayendo muy bien Angela.
Valen me empezó a mirar a los ojos y yo también, me ponía nerviosa, entonces empezó a besarme intensamente pero oímos que la puerta de la calle se cerraba y más tarde su madre empezó a llamarle, que oportuna… Valen se fue para ver lo que quería.

(Con Valen y su madre)

       ¿Ali se va a quedar a cenar?

       No, la voy a llevar a cenar a una pizzería.

       Vale, que caballeroso.

       Si si bueno nos vamos ¿vale?

       Adiós (:

(Narra Ali)

Valen entró en la habitación.

       Me voy a cambiar – me dijo

       ¿Para qué?

       Nos vamos a ir a cenar

       ¿A si, donde?

       A una pizzería, yo te invitó.

       No te voy a dejar

       Ya veremos…




viernes, 12 de octubre de 2012

CAP.1: Siempre hay alguien diferente.






(Narra Natalia)
Era un día como otro cualquiera, una mierda. Me acabo de cambiar de instituto porque sufro bullying. Los primeros días en este instituto fueron los peores de mi vida, pero ya estoy acostumbrada, nunca he tenido amigos. No me atrevo a decírselo a nadie porque sé que mis padres no me harían caso y tampoco me creerían además dirían que es porque soy poco sociable. Siempre me desahogo por la tarde en el baño de mi instituto porque me da miedo hacerlo en casa. Y como ya era por la tarde estaba yo en el baño y como no, vino Duna y su grupito de asquerosas amigas para empeorar las cosas. Me jode que piensen que soy débil. Entonces una “amiguita de Duna” abrió la puerta del baño con un paraguas en la mano y empezó a pegarme. Vi otra niña nueva que me miraba con pena y no me gustó porque otra cosa que odio es dar pena a la gente.

–Venga dejarla! Ya tiene suficiente por hoy! – dijo Duna.

Empezaron a andar hacia la puerta.

–Venga Ali – le dijo Duna a la nueva chica, que me miraba con pena.

–Espera ahora voy – tenía una voz dulce, parecía buena persona. Era de estura mediana, flaca y tenía el pelo castaño y bastante ondulado, tenía una sonrisa perfecta y muy blanca. Y si fuera un chico diría que es sexy.

(Narra Ali)

Me dio tanta pena ver como mis supuestas “amigas” le pegaban que quería ver si estaba bien. Parecía una niña súper buena era guapa y bastante alta y delgada y unos ojos color miel preciosos. No sé porque la trataban así, parecía simpática. Decidí hablarle ya que solo nos estábamos mirándonos.

       ¿Estás bien?

       Bueno me acaban de pegar con un paraguas y tengo todo los brazos rojos y con alguna herida

       Ven, ¿Cómo te llamas?

       Natalia y tu Ali ¿no?

       Sí, bueno me llamo Alicia pero llámame Ali, ven, sal del baño y te ayudo a limpiarte las heridas.

(Narra Natalia)

Salí del baño y fuimos hacia el lavabo.

       Te puedo hacer una pregunta– me dijo Ali.

       Sí, ¿qué pasa?

       ¿Por qué te pegan?

       Ojala lo supiera, pero ya estoy acostumbrada. Todas las tardes lo mismo. – Y empecé a llorar de nuevo.

       Lo siento– Y me abrazó.

Continuamos hablando, ella me intentaba consolar, era la primera persona que conozco que se preocupaba por mi y eso que no nos conocíamos.
Después de estar un rato hablando:

       No quiero sonar brusca ni nada pero no tienes amigos ¿verdad?

       La verdad es que no.

(Narra Ali)

Me caía muy bien y me parecía injusto lo que le hacían ya que no se lo merecía, además parece una gran persona. Quería conocerla mucho más así que:

       Pues ¿quieres estar conmigo?

        Sí, ¿pero tú sola o con tu grupito de amigas?

     No solo conmigo, esas ya no son nada para mí.

Pasaban los días y Natalia y yo cada vez nos conocíamos más. Descubrí que era una persona que tenía sentimientos muy fuertes e intensos, supongo que por todo lo que le había pasado.

(Narra Natalia)

Tuve suerte de encontrar a una persona como Ali era muy generosa y siempre pensaba primero en los demás. Además desde que estaba con ella me sentía más fuerte y ya no me hacían tanto bullying, solo me molestaban cuando estaba sola.